¡BASTA YA DE HIPOCRECIAS MORALES!
Se trata de impedir que la mafia fujimontesinista directamente controle todo el poder
Un boxeador está subido al ring de box y debe escoger a sus contrincantes. Ambos son terriblemente agresivos y tramposos. Incluso de más peso. Pero hay uno que ha introducido en sus guantes herraduras de hierro y está dispuesto a matar.
El boxeador eres tú y no puedes bajarte del ring. Tienes que pelear. ¿A quien escogerías como contrincante? Al de los guantes con herrajes, que va a despedazarte, o al otro? ¿Vas a cerrar los ojos y esperar que el destino decida por ti?
Esa es una gráfica que a mi modo expresa la situación de los peruanos hoy.
Tenemos al frente a dos indeseados candidatos que representan los deseos voraces de una oligarquía que necesita un gobierno que perpetúe el neoliberalismo, imponga la minería, que aplaste a sangre y fuego las movilizaciones sociales que resisten en defensa del agro, de la tierra, del ecosistema, del derecho a la vida, la soberanía y el bienestar.
El fujimontesinismo ha logrado construir una organización que está en manos de los mismos gangsters, hampones, delincuentes y terroristas que ya gobernaron antes.
Uno de sus vicepresidentes fue sacado de carrera, por tramposo, y para tapar un sucio arreglo con el JNE que salvó la candidatura de Keiko Fujimori, (el apellido maldito que intenta ocultar por el desprestigio que hasta ella acepta).
El otro vice, Chlimper, es un matón con metralleta, un lumpenburgués, que ya amenazó una vez con agarrar a balazos a los trabajadores en huelga. ¡Y qué no haría desde el poder!
Esta candidata además cuenta con el apoyo de una mayoría congresal entre los cuales, comenzando por la número uno, la Chacón, hay gentuza que ha llegado al congreso para evadir la justicia.
Lo "más-pior"
En la base de este movimiento fujimontesinista hay una lumpenada compuesta por ex presidiarios, sicarios, prontuariados y exconvictos, esperando órdenes. Esta gente es la misma que acompaña a jueces, policías, fiscales y notarios, que se hacen de la vista gorda, cuando en un caso de desalojo, sea de tierras recuperadas por el pueblo, o de casas embargadas por humildes propietarios que no tienen con qué pagar sus deudas, descargan sus frustraciones y su mala vida con la violencia más brutal y asesina imaginable.
Se puede hablar mucho más del fujimontesinismo de Keiko Fujimori. Que liberará a su padre y también al cómplice, su "tío Vladi", con todas las consecuencias que ello produciría. Pero, con el poder ejecutivo y legislativo en manos, todo lo pueden legitimar. Legalizar.
Con el control de los medios que ya tienen, absolutamente comprados con millones de dólares gastados en publicidad, harán que te comas su historia y ellos te convencerán que Fujimori fue una víctima de los "rojos caviares" y que Montesinos fue el héroe que nos liberó del terrorismo... y tú te lo creerás.
Los medios dirán que Fujimori fue víctima de torturas de su mujer, y no al revés, y tú te lo vas a creer.
¿Vas a permitir que estos regresen al poder?
Una nueva derrota de Keiko Fujimori podía ayudar a desmantelar la mafiosa organización, los lúmpenes que la rodean dirán “a otra cosa, mariposa”, pues se les acabaría la chamba.
PPK, el otro enemigo, lobbysta apátrida, que intentará seguir vendiendo el Perú a precio huevo, a cambio de una jugosooosa "comisioncita", NO tiene la estructura gangsteril del fujimontesinismo montada en su débil o inexistente organización.
Tienes que pelear y este es el momento de abrir bien los ojos y escoger. No hay remedio. Las justificaciones éticas y morales, solo revelan las medias tintas de una clase media (pequeña burguesía), a la que le da lo mismo uno que otro, que se justifica como los curas pedófilos, con razones morales.
Tenemos que escoger con quién nos vamos a trompear, ya pisamos la babita y no podemos negarnos a la pelea.
Soy un revolucionario socialista, marxista. Desde hace casi 50 años. Nunca he cambiado de bandera, voté en blanco entre Fujimori y Vargas Llosa, cuando un grueso de la izquierda socialdemócrata y estalinista, o de esos que hoy se hacen los inmaculados, votaba en los 90 por alias "el chino".
No le corro a la pelea. No impongo mis opiniones, estoy seguro que en esta lucha, que es de clases, los trabajadores, la clase social con la que me identifico, (que muchos "izquierdistas" ya olvidaron su existencia), prefiere combatir a PPK que a Keiko.
¡Basta ya de hipocrecías y de indolentes argumentos morales pequeñoburgueses, que sólo están confundiendo a nuestros jóvenes recién ingresados a la pelea!
Me taparé la nariz y chuparé limón contra la pestilencia y las naúseas, pero no permitiré que los hampones fujimontesinistas regresen con todo al poder. Hay que sacar la cara sin temor a una buena decisión. Nada de bajar la cabeza llenos de sentimientos de culpa por una supuesta falta a la ética y a la moral que, en última instancia, es de ellos, porque solo conviene a ellos, el peor de los enemigos, el fujimontesinismo.
No haré la fariseica señal de la cruz.
Este 5 de Junio, en su Séptimo Aniversario, en nombre de mis hermanos mártires indígenas amazónicos del Baguazo, marcaré con la X, contra Keiko Fujimori.
Tapándome la nariz, votaré por PPK.